¿Escuchas eso?Es mi corazón queriendo salir de mi pecho porque te ha visto sonreír.
Es sorprendente cómo puede llegar a mover el amor a una persona, increíbles los miedos que le pueden llegar a rodear por la inseguridad de un futuro incierto, por la posibilidad de perder a la persona amada, pero también casi imposible la felicidad por estar en este instante, en presente absoluto con esa persona. Son los pequeños detalles los que hacen grande a una persona día a día, no me cansaré de decirlo, y con un detalle tan simple como un abrazo o una sonrisa, él alegra mis días más oscuros incluso sin quererlo. En un año se ha ido haciendo (y sigue haciéndose) cada vez más grande en mí, cada vez es más imprescindible para mí y cada día me enamoro un poquito más de él. No lo quiere ver, pero es mejor persona y más grande en todos los sentidos de lo que él se cree. Él es mi incondicional, mi héroe de otoño, el 'reconstructor' de mi puzzle; mi felicidad diaria.
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