viernes, 24 de mayo de 2013

Silencio.

Una señal. Una palabra. Un "hola" que se escape de tu teclado mientras yo muero por no poder decirte lo muchísimo que te extraño. Una carita sonriente como respuesta mientras rueda una amarga lágrima por mi mejilla. Todo eso sería mejor que este insoportable silencio, que esta angustia frente a la sensación de que gritamos demasiado nuestro sueño y así no se cumplió.
Un suspiro y ganas de nada. Ganas sólo de tu abrazo. Ganas de que un "te quiero" vuelva a escaparse de tus labios. Y nada. Ya no tengo remedio.

"It's a quarter after one I'm all alone and I need you NOW"

martes, 21 de mayo de 2013

Pasó de ser Oniria a ser Insomnia , no conciliaba el sueño más sin sus "Buenas noches".

domingo, 19 de mayo de 2013

Atrévete a acompañarme...

Por ti subiría a ese cable a hacer equilibrismos un millón de veces más. Volvería a arriesgarme, volvería a repetir cada uno de los pasos que hemos dado en este largo cable hasta encontrarnos, y seguiría de tu mano hasta el final del mismo. Por ti, cortaría la red pero nunca el cable. Es de alta tensión, puede dar calambre, claro que sí, pero nadie dijo que fuera fácil.

...vamos a andar por los cables.

Sin red.

Nos regimos por el miedo, cada día lo tengo más claro. Se me acaban los días, las horas, los minutos, los segundos de mi felicidad y todo por el miedo a no arriesgarnos. Por el miedo a revivir lo que en algún momento nos hizo daño, por el miedo a arriesgarnos. Por el miedo a creer que todas las personas son iguales y nos pueden hacer el mismo daño. Por el miedo, en definitiva, a vivir. Nunca me he caracterizado por mi valentía, pero si se trata de ti, me tiro por un precipicio, sin red, sin paracaídas sin nada que amortigüe mi caída. Porque, en definitiva, eso es amar, ¿no? Si nos dejas intentarlo no dejaré que te arrepientas ni un segundo de haberlo intentado. No te haré daño, protegeré tu corazón como hasta ahora lo he hecho y te haré todo lo feliz que esté de mi mano. Quien no arriesga no gana, ¿no? No son sólo palabras, y lo sabes. Estoy dispuesta a todo si se trata de ti. No te estoy pidiendo un para siempre, eso sólo el tiempo lo decidirá, te estoy pidiendo un "intentémoslo".

Día 3.

No cambiaría ni un ápice de esto, simplemente nos infundiría más valor a ambos para intentarlo y no dejar que sea el tiempo el que decida por nosotros. Despertar ahogada, sobresaltada y con el corazón queriendo salir de mí no es lo peor de tu partida. Lo peor es la sensación de soledad, el vacío que has dejado en mí, el saber que no te volveré a besar, a tener cerca, a abrazar, a acariciar, a ser la razón de tu sonrisa...al menos no como entonces. Vivo en un constante shock porque aún no me creo que te hayas ido, que al final del día no vaya a verte, a sentirte...me niego a creerlo, me niego a creer que te he perdido a pesar de que cuando lo necesite sé que estarás ahí con tu pícara sonrisa y con tus miles de consejos que me reconforten. Me niego a creer que no será lo mismo. No puedo darme por vencida a perder así de fácil mi felicidad. En el momento en el que el dolor pasa a ser físico te das cuenta de que tu amor ha sobrepasado ciertas barreras y de la magnitud del mismo.

"Me moriré de ganas de decirte que te voy a echar de menos"

sábado, 4 de mayo de 2013

Se me acaba el tiempo.

Te me escapas entre los dedos como el tiempo que nos queda, que me queda. Una noche más el miedo y las lágrimas se apoderan de mi almohada y el insomnio vence a mis cansados ojos. Cansados de llorar, cansados de gritar que te voy a echar de menos. Aún no te has ido y ya te extraño. Los días se me hacen más cortos, el tiempo se pasa demasiado rápido y no sé cómo pararlo y retenerte a mi lado. Quizá me equivoqué aquel día que basé mi felicidad en ti, pero siempre serás mi error más bello, la mejor de las casualidades que ha podido cruzarse en mi camino.
"Time is runing out"

jueves, 2 de mayo de 2013

I'm not in f*cking Wonderland.

Siempre me han dicho que vivo en mi mundo de la piruleta, que lo veo todo de color rosa y que llevo siempre una sonrisa en la cara. Puede que no diste mucho de la realidad, pero que viva en mi mundo de la piruleta no significa que no vea la realidad, que lo vea todo de color rosa no significa que no haya negro en mi vida y que lleve siempre una sonrisa en la cara no conlleva que sea feliz. De hecho, si últimamente llevo una sonrisa en la cara es porque él consigue dibujarmela, pero no es mi mejor momento. Siento que mi mundo se está desmoronando en cuestión de segundos y no puedo hacer nada para evitarlo; mi cabeza no está aquí, está a 312km de distancia y mi sonrisa sólo le pertenece a él, y el día que se vaya, sólo será un borrón en mi cara. Hoy no estoy poética, ni siquiera pretendo que esta entrada quede decente, simplemente necesito desahogarme, necesito gritar y mi mejor manera de gritar siempre han sido las palabras escritas.
Hace tiempo que mi mundo de las Maravillas no existe, que me he dado cuenta de que la vida no era tan bonita como un día me la pintaron, y que el amor siempre conlleva dolor.
Hace tiempo que mis compañeras de almohada son lágrimas amargas por el miedo a perderte.